martes, 27 de agosto de 2019

QUÉ HACEMOS AQUÍ EN LA WEB Y ALGO MÁS... 27 de Agosto

Nadie dice nunca la última palabra. No podemos juzgar a nuestros adversarios como si nuestra propia causa estuviera identificada con la verdad absoluta. Raymond Aron.

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Misma ruta del formidable Taconeo

GRAN OMERO CAMPEÓN Y BUEN FONDISTA
EN EL CLÁSICO DE LOS PROPIETARIOS
   Foto: Jorge Yánez 
Total que este domingo tendremos al campeón Gran Omero (lo considero de excepcional clase como la mayoría de la afición en Venezuela) en el Gran Clásico de los Propietarios, desde luego la selectiva estelar en lo que será la esperada Gala Hípica en homenaje a la Caracas con su Ávila monumental. Se espera en consecuencia un espectáculo de primera, como se lo planteó Hugo Albarrán (y este servidor en consulta para algo bueno en aquel entonces, lo garantizo) cuando creó el conjunto de clásicos inspirado en el mismo esquema de los Internacionales del Caribe, lo que por otra parte significaba un escalón en avance hacia las cinco o seis carreras conocidas (hoy de escenario en Gulfstream Park que ninguna otra sede del Caribe puede montar, con atractivos premios, de paso)

Gran Omero, que sin duda es lo mejor de la actualidad criolla con el permiso del prospecto ya antes citado, el invicto Crackstar, cara blanca como Oliver uno de mis primeros ídolo equinos en mis comienzos hace mucho tiempo ya, irá contra el importado Tap Daddy y el consagrado clásico Mayoral, aparte de Le Capannelle, Mannshat, Tuki Monton, Papa Pedro, El Gran Perseo y Switch Hitter.
Con el permiso, Gran Omero irá al baile de etiqueta como lo hizo otro campeón criollo de su tiempo llamado Taconeo. Fue el 2007 Gran Clásico de los Propietarios con premio de unos 400 millones de bolívares, que en dólares cubrían unos 195 mil en el global y de los cuales 127 mil quinientos correspondieron al ganador, el moro Cheiron un hijo de Maria’s Mon que entrenó su propietario el amigo invariable Pepe Iadisernia. El jinete fue Manouel Cruz. No hará falta advertir que aún teníamos una moneda fuerte y algunos colaboradores en la empresa privada que atendían a los llamados de Albarrán, quien convencía a todos con apenas alzar el teléfono. Les decía que valía la pena utilizar al hipódromo, sus caballos, sus gentes y la gran afición claro, para vender, promover, vean el ejemplo, aunque medio exagerado, de Runhappy, un buen sprinter hoy en la cría en Kentucky.
Cheiron fue una  tromba en esos cien metros finales para dar caza al guapo Taconeo y poco antes de la raya superaba por cabeza a Papa Lucas. Taconeo quedó tercero a las órdenes de Rigo Sarmiento, apenas bajando la guardia en ese corto tramo decisivo. Había dejado en claro su clase contra mayores y no solo el importado Cheiron, también otro de EE.UU. de nombre Famous Frolic, el mexicano Wild Card y otro de USA antigua abreviatura del gran país del norte, Arigato, que llegó tragando tierra entre los últimos con Northener que no entró en carrera.
No estará de más, pues, que Gran Omero pruebe y trate de mostrar esa clase para orgullo de su propietario y una divisa más que conocida que, igual que otras, suele ir y venir como el marido o novio de la madrina que jamás olvida. Es que el amor en el sabio amante, nunca termina, así sea el primero, el segundo o el tercero…Es eterno.
Como señalo en la entrada de estas notas, me parece, creo con cierta seguridad que Gran Omero es potro duro de matar arriba de la milla o 1.600 metros, en los 1.800 la distancia del Caribe y en los 2.000 el tiro del Clásico de los Propietarios. Menos mal que no hablamos de milla y media porque esto no es Belmont Park ni hay carreras en turf o sobre la grama.
Taconeo un valioso hijo de Water Poet como todos saben, padre también del sobresaliente criollo King Seraf, al que alguna vez promocioné con el gran gusto de siempre y, de nada, a Dios gracias. De allí deviene Gran Omero, de King Seraf, al que no solo deseo suerte. Todo lo bueno para él y sus allegados.
Y así, queridos amigos y lectores, para terminar con este primer tema en la web.  Sigo en los caminos de mi tierra cargado de sueños y esperanzas para volver, volver, andando sin parar ni mirar atrás por la misma senda donde se han ido, los pocos sabios que del mundo han sido.

No sé si fue Rodríguez Vera quien inventó estas vainas de viejos. O El Potro Roberto, a quien le quedé debiendo un trabajo prometido, tan ocupado como estoy pero viviendo, a Dios y La Virgen siempre agradecido.
Su padre Noble Mision es hermano de Frankel

EL TRAVERS STAKES DE CODE OF HONOR.

En primer lugar Code Of Honor corrió el rico y consagratorio Travers Stakes en un crono similar al de Catholic Boy, West Coast y el de Keen Ice cuando este se imponía sobre el triple coronado American Pharoah. Pasando solo el de Arrogate que mantiene el récord de 1.59: 36. Code Of Honor empleó un 2:01.05 el mejor por fracciones en los últimos años. ¿Quién dice que no estamos ante un potro capaz de cualquier cosa grande o mejores en lo que resta del año? Se verá.
Code Of Honor es hijo de Noble Mision un Galileo en la matrona Kind que dio nada menos que a Frankel, además de Bullet Train y otros sobresalientes para el Prince Khalid Abdullah en el Juddmonte Farm.
Noble Mission campeón en el turf sumó entre otros el Champion Stakes de Ascot, el Grand Prix de Saint Cloud y el Sir Gordon Richard Stakes para más señas.
No quiero decir que, en un futuro, si se lo proponen, Code Of Honor pudiera ser llevado a las carreras grandes sobre el turf, aunque de paso queda atrás un mito. Que los Galileo no rendirían igual sobre arena o tierra, Dios nos libre.

POR UNA CABEZA EN UN FINAL REÑIDO
Así se nos iba el pick six de Saratoga (me llevaron un pelín) en una combinación no muy costosa que hizo mi amigo José Sequera por allí en la zona de Alberta. A punto y por una cabeza en un final reñido que no volveremos a ver quizá, a menos que en un próximo domingo Shancelot pueda correr de nuevo en una similar, y nos juguemos enteros ligando a lo criollo.
Él perdió por suerte mala y dejó ver que es un sprinter nato capaz de mejores cosas, si bien no repitió lo que había hecho en el compromiso previo.
Los caballos son así y no hay aquí ningún descubrimiento en insistencia de los hechos, más como aficionados sensibleros, vuelvo y repito tal acostumbraba decir eso el colega Félix Gustavo Correa en nuestros tiempos en El Nacional.
Entre caballos de parecida clase en una carrera de sprinters nunca existe diferencia de tres segundos, si acaso dos, por ejemplo. Y tres segundos se van en un suspiro.
¿Cuántos se le fueron a Shancelot en el brinco, desde el puesto uno? No partió mal, ojo. Pero sí creo perdió unas fracciones (quintos de segundos dicen en mí pueblo) que pudieron, como en el tango del arrabal, ser determinantes en la llegada.
Entró en la recta con unos dos largos, casi tres, cuando Call Paul el caballo de Irad Ortiz dejaba la paja y comenzaba a doblar las patas.
Al trasponer la meta el castaño Mind Control hijo de aquel Stay Thirsty buen caballo que montaba Ramón Domínguez, sorpresivamente pasaba a ganar, y Shancelot también cedía por un pelo ante Hog Creek Hustle que tampoco estaba en los números de nadie.
Cuando en las carreras  gane siempre el mejor, desde luego el gran favorito con jinete y entrenador de máxima clase, el más grande stud inclusive, se acabará el hipismo y Gardel jamás habría creado su encantadora versión que nos los explica todo en una bella melodía. Y uno entonces despierta de sus sueños.

El LUNES 2 CERRARÁ SARATOGA

Con el Hopeful Stakes, histórica carrera para potros de 2 años, Saratoga llegará a su final.
Green Light Go un hijo de Hard Spun por Danzig ganador del Saratoga Special debe salir como gran favorito, al parecer.
La carrera por supuesto es un grado uno en 1.400 metros. El año anterior justamente fue para Mind Control triunfador en el Allen Jerkens y, entre sus ganadores, con bien ganada fama, también figura Shangai Bobby el padre de Shancelot, 2012, con Rossie Napraknik y preparación de Todd Pletcher.

Un descanso breve en Nueva York para regresar a Belmont Park en otra temporada de lujo con grandes premios, por supuesto. El calor de Saratoga será un poco más de historia y la misma seguirá con el deshojar de la enredadera, el “fall” como lo llaman en Norteamérica.
Vienen grandes carreras, de modo pues, no se vallan, como decía aquel famoso narrador de béisbol, pues todo continuará siendo bueno. Soy devoto del norte, no lo niego. Y vendrán las Breeders Cup, en el bello hipódromo al pie de la esplendorosa montaña.   

SUBASTAS TAMBIÉN EN VENEZUELA
Las subastas que en un tiempo fueron grandiosas formaban parte del espectáculo hípico. Se daban entre septiembre, octubre. Me cuentan que vienen, con optimismo pese a todo.
Recomendé a José Yánez el genio, un Champlain por aquello de que se deben “seguir” a los Seeking The Gold. Con la intención de llevarlo a un debut o para campaña en el hipódromo de Miami, Gulfstream Park que es suerte de una segunda casa.
Por allá está Cacciatora, en busca de clasificación o algo más, en fin, un plan que lo había escuchado entre criadores de garra y buena vibra como debe ser.
Ya vimos en ese esquema a La Venezolana, que tiene clase, tal fue el señalamiento.
No hay otra. Andar el camino, caminante, si así lo traza el destino, ese futuro que no puede ser malo, si nos aguarda pleno de optimismo.
José Yánez puede y con él otros cuantos soñadores como se les debe llamar a los hípicos de corazón. Como lo fue don Pedro Baptista.
Yo también sueño. Que Runhappy o su gente que es sencillamente buena, algún día promoverá estas notas que no suenan con magia mozartiana, pero lo intento. Como el burro y su flauta.

En diciembre


Caribbean Classic. $300K Para potros o potrancas en 1.800 metros.
Confraternity Caribbean Cup. $100K Tres y más. 2.000 metros.
Invitational Cup For Imported. $91K Tres y más. 2.000 metros.
Lady Caribbean Cup. $124K Potrancas de tres en 1.700 metros.


Caribbean Cup Speed. $114K Tres y más años en 1.200 metros."


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