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EL 2 DE MAYO EL ARKANSAS
EN DÍA DEL KENTUCKY DERBY
Dicen en mi pueblo que lo que es del
cura va para la iglesia. (Breve análisis de última hora.)
EL
ARKANSAS DERBY EN 2 DIVISIONES
Desde aquí hasta septiembre hay un
largo trecho. Para entonces uno no sabe, decía Don Cuto Lamache a quien Dios tenga en su gloria, si estará en
acción el Derby en Kentucky que
ojalá no tenga lugar, si hasta allí se llega, con rosas marchitas.
En fin el primer sábado de mayo como advertí en la reseña en blog del 9 de abril, se disputará el Arkansas Derby que el año anterior fue
de un millón de dólares (lo ganó Omaha Beach con Improbable perdido en dura
lucha) con once aspirantes. Esa era la fecha de las Rosas como es conocido.
Y tenía entonces la esperanza (lean de nuevo o lean quienes no hayan leído
la reseña en cuestión) de que sería una carrera como la de 2019, sin reparar en que debido a que
hay pocos hipódromos en acción y por los hechos muchos potros de tres años en
busca de mejores glorias, que sería una carrera como el Derby.
Se entiende pues el hecho de las dos divisiones en las que, con la buena fortuna que en ocasiones para
seguir a Bob Baffert, no chocarán
por ahora su Nadal contra la locomotora
sin frenos (en el decir de Alfonso
Rodríguez Vera) el invicto Charlatán.
Si se inscribían 18, Charlatán quedaba
fuera y, todo lo contrario, estará en la primera
división por el puesto uno en
los 1.800 metros de la ligera o rápida
pista de Oaklawn Park, para hacer su gusto en la delantera. Agárrense de la cola, ha dicho el
handicaper citado.
Lo demás para verse y disfrutar de
cualquier modo en casa. Sin el público animando y ligando en las tribunas. Que
tronco de vaina nos han echado.
King Guillermo irá contra Nadal (lo tendrá al
lado en la otra división. Quedaría para especulaciones futuras los tiempos,
parciales, remates, el suceso o lo que pueda ocurrir en las dos carreras,
aunque en este caso, conforme a un tren de carrera imprevisto y los
imponderables de los que no pueden saber ni que quisieran las modernas Casandras.
Insisto en que estaremos ligando a King Guillermo, no solo por fidelidad
con los amigos. Nos entusiasmó su
carrera en el Derby de Tampa, en ese remate extraordinario, y en su trabajo de preparación para el Arkansas
se ha visto más que bien, plenamente ratificado el concepto por el entrenador
Juan Carlos Ávila.
El sábado es
la cosa. Escribo en la noche del lunes
27 de abril. Cuando es francamente posible la concreción de los sueños,
crece la esperanza, la fe, dos de las tres grandes virtudes teologales, me decían
hace mucho, cuando era chiquito.
Menos
mal que falta menos.
De entrada hago saber que estaré
ligando a King Guillermo
en su carrera del 2 de mayo, fecha en la cual él iba a disputar el Kentucky Derby contra otros 19
inscritos. Entre ellos, con seguridad, varios de los que estará
confrontando el primer sábado del mes de las flores, como ya sabemos el Arkansas Derby de Oakland Park
en 1.800 metros.
Se trata de una gran carrera, por
supuesto. Allí estarán salvo cambios de última hora, los sonoros Nadal y Charlatán (con
acento aunque no debería) de Bob
Baffert, además de Wells
Bayou ganador del Louisiana Derby y Sole Volante, que sigue en los
números de los handicapers, segundo un poco distanciado de King Guillermo en dicho Tampa
Bay Derby.
El Arkansas
del año anterior lo ganó Omaha
Beach con Mike Smith y Richard Mandella sobre el favorito Improbable de
Irad Ortiz y Bob Baffert. Tercero fue Country House luego ganador del rarísimo
Derby 2019 por distanciamiento de Maximun Security.
Mi consentido Omaha Beach (el hermano materno de Siete
C que está de semental en Venezuela) llegaba como gran favorito para ganar las Rosas pero fue
retirado (como igual le ocurrió a unos días del millonario Pegasus Invitational de
Gulfstream Park). Omaha
Beach por esas cosas del destino apenas pudo mostrar su gran clase en la
ruta de la triple corona aunque infortunadamente no alcanzó toda la merecida
gloria.
King Guillermo,
pues, tiene que estar en este Arkansas Derby 2020 y tengo la convicción
plena de que, sí se puede.
Para ello solo le bastaría repetir la
formidable carrera que hizo en el Tamba Bay Derby. Parece ser, como
pocos purasangres especiales, virtuoso en la manera de correr donde pueda lograr
mejor provecho, si posible colocado no demasiado lejos de los velocistas para
rematar duro y alcanzar la meta triunfal.
Los favoritos claros serán los potros de Baffert. Charlatán ha
demostrado ser demoledor en punta y no hará otra cosa en el Arkansas. Corre bonito, en
pocas palabras. Será él, no hay otra, el marcador de parciales que seguramente
deben ser muy rápidos. ¿Cuál seguirá ese tren de carrera? Por lo visto ninguno.
Alfonso Rodríguez Vera
dice que Charlatán
es como un tren demoledor, o una locomotora sin frenos. Y en bajada.
Figúrense.
Nadal, llamado el gigantón, supuesto
gemelo del triple coronado Justify,
iría en carrera como quien no quiere la cosa para venir en busca del puntero ya
entrada la recta. Es lo que todos suponemos que pasará, pero carreras son
carreras decían nuestros abuelos y una historia por muy buena que sea no puede
escribirse antes de los hechos que deben cumplirse, claro.
¿Y dónde vendrá King Guillermo? Estará en busca
de lo suyo en esa recta final contra el miedo ¿miedo a qué? por muy buenos que
parezcan los rivales nombrados. La peor carrera, aquella que no se corre.
Por otra parte si Nadal, que sería entonces
suerte de acorazado con misiles y cañones bien aceitados, puede correr sin
desespero en los primeros tramos para venir con todo su poder cuando él como
caballo y su jinete decidan lanzarse al ataque.
¿Y a King Guillermo no le tocaría nada en ese
supuesto reparto estratégico? Seguro que sí.
Vimos un ejercicio de King Guillermo, en franco
galope, tendido, a su gusto, sin demasiado esfuerzo.
Juan Carlos Ávila
el mejor entrenador que hemos visto en mucho tiempo dijo, más o menos, que en
su larga carrera profesional nunca tuvo un caballo con la clase que aparenta o
muestra su King Guillermo
que es propiedad del muy querido jonronero Víctor Martínez, una de las glorias de nuestro
béisbol de grandes ligas.
Diría de nuestra parte que el catire Ávila como lo llaman sus íntimos entre tantos
campeones por él entrenados, jamás contó por supuesto con un aspirante al
Derby, de un papel respetable sobre el cual se hará un sencillo análisis.
KING GUILLERMO ¿TÚ QUIÉN ERES?
Es hijo del conocido Uncle Mo (Indian Charlie y nieto materno
de Arch) en Slow Sand por Dixieland Band un Northern Dancer (en blog previo un
estudio sobre este Jefe de Raza en homenaje a Luis Navas)
Su
madre dicha Slow Sand
corrió apenas dos veces sin ganar y llevada a la cría por ser precisamente una Dixieland Band y nieta materna
de Seattle Slew. La entrenó Todd Pletcher.
Su segunda madre o abuela Slow Down (Seattle Slew en Corrazona por
El Gran Señor (de aquí deviene el imbred a Northern Dancer)
corrió 15 veces. Inició campaña en Longchamps donde logró par de segundos y
un allowance para cerrar en un clásico en Saint Cloud contra grandes
yeguas.
Más tarde Slow Down estaba en California. Ganó en el
viejo Hollywood Park, un
hándicap en Bay Meadow y se batió lo menos par de veces en buenos
premios en Santa Anita Park.
En
fin, un pedigree nada
despreciable, de manera que, entre tanto logre sumar en carreras de
grado en EE.UU. aseguraría pase a la cría universal con suficientes méritos.
En la historia por escribirse, se
verá. Esto aún no termina, ni siquiera una vez realizado cualesquier deslinde
en la mejor carrera puesta en cartelera en estos trastornados días. Los que
eran o pudieron ser de la tradicional y hermosa primavera del Derby en
Kentucky.
¿Y QUIENES SON CHARLATÁN Y NADAL?
CHARLATÁN.
Hizo su estreno en Santa Anita Park el 16 de febrero en una carrera de 1.200
metros. Los reportes de ejercicios decían de él que era un velocista (sprinter)
excepcional y eso fue lo que se vio en carrera.
Salió cómodo desde la partida, a su
gusto, en 21-4. Siguió en 44-3 los 800 y los mil metros en 56-2. Con remate de
unos 12-2 (aproximado) cubrió la distancia en 1:08 tres quintos más o menos los
mismos cronos que suelen hacer los protagonistas de una Breeders Cup Sprint
Classic.
Charlatán hizo segunda salida como Don Quijote
el 13 de marzo, en Allowance Opcional Claiming en una milla contra rivales que,
por supuesto ni en sueños calzan su clase.
Se sabía que ganaría a placer y en
efecto fue lo que hizo, en una carrera de preparación pura y simple. En punta
siempre y desde luego, con registro de 21-1 el primer cuarto, 46-4 la media
milla, los tres cuartos o 1.200 metros en 1:11, 1.400 metros en 1:23 dos
quintos y cerró la milla en 1:36 con 24 centésimas y más de 10 largos sobre el
que llegó segundo, al que no se llamará fue un rival y mucho menos de postín.
Charlatán nació un 2 de marzo. Hijo de Speightstown (Gone West) en
Authenticity por Quiet American (Fappiano y nieto de Dr. Fager)
Como yearling fue valorado (subasta)
en 700 mil dólares.
La madre Authenticity yegua de grado, ganadora del Shuvee Hándicap G-3
en Saratoga. Segunda en el Rampart de Gulfstream Park. Segunda en el
Personal Ensign G-1 en Saratoga y tercera en la 2013 Breeders Cup Distaff G-1
de Santa Anita Park detrás de Beholder y Close Hatches, por cierto una carrera
de campeonas en la que también se batieron Royal Delta y Princess Of Sylmar.
También segunda de Beholder en el 2013 Zenyatta Stakes de Santa Anita.
NADAL.
Es algo así como un peso pesado que puede correr en velocidad de ser necesario.
Cosa que por supuesto no hará en el Arkansas.
Como yearling costó 65 mil dólares y
a los dos años salió por 700 mil dólares en subasta. Criado en Sierra Farm es propiedad de
varios, suponemos gente entusiasta y alegre.
Hijo de Blame, por Arch y nieto materno de Seeking The
Gold
(perdí ese trabajo, mi esfuerzo, como siempre) productor de más de 4 millones de dólares y ponderado no solo por
ser el único que le ganó a Zenyatta.
La madre de Nadal es Ascending Angel por Pulpit. No
ganó en doce actuaciones pero algo le vieron para tirársela a Blame.
La abuela Solar Colony, por supuesto hija de mi inolvidable Pleasant
Colony, ganó dos en once. Tampoco es mucho.
Nadal
va de tres-tres.
Ganador del San Vicente Stakes y el Rebel Stakes en Oaklawn, mismo escenario
del Arkansas Derby.
Nadal ganó dicho Rebel en 1:45 los 1.700
metros con Joel Rosario. Y el San Vicente en 1:22 con 59 centésimas desde luego
en 7 fourlones o sea 1.400 metros.
Finalmente y lo dejo hasta aquí, King Guillermo logró
su Tampa Bay Derby en 1:42 con 63 centésimas. A menos de un segundo del que
creo crono récord agenciado por Tacitus el año anterior.
